En el último pleno ordinario el equipo de gobierno de Guillem Alsina aprobó un nuevo plan. En esta ocasión el plan de acción de agenda urbana con un coste total de 150.000 euros y que se sumará a la larga lista de planes encargados en los últimos siete años, bien pagados, y que son la demostración de la nefasta gestión del gobierno del PSPV-PSOE, Compromís y Som Vinaròs.
Aprobaron un plan de turismo y marketing, que adjudicaron a dedo, y que no ha servido absolutamente para nada, pues de las medidas reflejadas en el plan no se han materializado ni un 10% de las mismas. Eso sí, ya está encargada una revisión de ese plan para que antes de las elecciones el gobierno de Alsina pueda hacer una rueda de prensa, vender humo y volver a engañar a los implicados anunciando medidas que nunca se llevarán a cabo.
Redactaron un plan estratégico de ciudad, que también contrataron a dedo, y que no se atrevieron a llevar al pleno municipal. Antes de las elecciones municipales de 2019 publicaron ese plan en un libro del que se pagó la maquetación y edición a buen precio. ¿De qué sirvió? De nada. Una vez publicitado en prensa se olvidó en un cajón y ya vendrán tiempos mejores.
Y siguieron con el plan de movilidad urbana, con el que se gastaron 134.000 euros, y que el concejal de Urbanismo, Marc Albella, ya anunció en el pleno que no se pensaba cumplir ni ejecutar. ¿Entonces para qué derrochan el dinero de todos los vinarocenses?
El plan especial del casco antiguo lleva redactándose desde la pasada legislatura. Nadie sabe en qué estado está, ni las lineas maestras de ese plan que afectará a todas las viviendas del centro histórico de Vinaròs. Una vez más serán miles de euros despilfarrados y que únicamente servirán para que Alsina convoque una rueda de prensa, se haga la foto y el plan se olvide en un cajón.
En total llevan ya gastados más de 500.000 euros en planes estratégicos que únicamente certifican que quienes gobiernan llegaron al poder sin ningún plan ni ninguna idea de lo que necesitaba nuestra ciudad.
Vinaròs necesita de un gobierno que tenga las ideas claras y trabaje desde el primer día en lograr los objetivos marcados como prioritarios, pero Alsina solo ofrece un gobierno que despilfarra en planes que no sirven para nada.