La costa sur sigue esperando respuestas

Se cumple un año desde la cacicada del Alcalde Guillem Alsina en la costa sur. La imposición del sentido único en la carretera de esa zona turística fue tomada de forma precipitada, sin informes técnicos, sin valoraciones de seguridad vial y sin escuchar a los vecinos.

La comisión de investigación demostró que el gobierno de Alsina actuó de forma prepotente y, que un año después, sigue manteniendo esa decisión que perjudica el día a día de los vecinos a los que, por cierto, sigue sin responder ni escuchar.

Los que ahora dicen que gobiernan prometían hacerlo escuchando a los vinarocenses. Pues los vecinos de la costa sur reunieron 1.000 firmas y siguen sin ser escuchados. Alsina escucha únicamente a quien le aplaude; a aquellos que no comparten sus formas les ignora.

La unidireccionalidad pone en riesgo a miles de vinarocenses obligados a circular por la antigua N-340, la misma carretera por la que circulan centenares de camiones obligados a utilizar el tramo vinarocense porque la Alcaldesa de Benicarló los desvía porque no quiere que pasen por su tramo urbano. Aunque como los dos máximos gobernantes son del PSOE no esperen que nuestro Alcalde levante la voz para defender a sus vecinos.

Desde el Partido Popular siempre hemos dicho que había otras alternativas, que las casas se construyen desde los cimientos y no empezando por el tejado y que el diálogo con los vecinos de la costa sur era y es imprescindible.

Fuimos los únicos que pusimos en valor la costa norte y la costa sur en nuestro programa electoral en las últimas elecciones. Lo hicimos porque estamos convencidos que necesitan un impulso, una transformación, y que todo ello se debe hacer de forma programada, planificada y atendiendo a unos vecinos que pagan los mismos impuestos que todos pero reciben menos servicios que la mayoría.

Dentro de dos años, cuando tengan que pedir el voto, aquellos que ahora han ignorado y menospreciado a los vecinos de la costa sur, poniendo en riesgo sus vidas al obligarles a circular por una carretera saturada, les dirán que para ellos son unos vinarocenses de primera, que lo merecen todo, hasta ser tomadas en consideración sus reivindicaciones, pero las palabras se las lleva el viento y sus decisiones en esta legislatura les dejarán desnudos frente al espejo.

Lluís Gandía, presidente del PP de Vinaròs