Hiperventilados en la izquierda

El pleno de investidura estuvo marcado por la hiperventilación de aquellos que diciéndose ser demócratas y muy de izquierdas no aceptan el resultado de las elecciones y pretenden coaccionar con sus comportamientos a los representantes elegidos por los ciudadanos.

El discurso incendiario previo del PSPV-PSOE en su rueda de prensa fue complementado por el gasto innecesario de una pantalla gigante situada única y exclusivamente para caldear el ambiente y poder continuar así con el lamentable espectáculo que es insultar a los representantes de todos los vinarocenses.

El Secretario General del PSPV-PSOE afirmó pocas horas antes del pleno de investidura que existía un pacto oculto entre el PP, el PVI y VOX. Pues se demostró que no había nada oculto y lo que quedó claro, antes incluso de la investidura, es que el nuevo concejal socialista mintió a todos los vinarocenses con la finalidad de seguir caldeando el ambiente.

Los congregados en la plaza Parroquial, junto al pantallón de Alsina, insultaron a su antojo y sin discreción a los concejales del PP, PVI y VOX en el momento de su juramento o promesa. Decían hacerlo para evitar un gobierno que sería machista y contra las mujeres pero ellos bien que se despachaban insultando a la portavoz del PVI.

Los carteles y gritos proferidos por quienes parece que no se han enterado que los vinarocenses votaron por el cambio en las urnas parecían muy nerviosos, con gestos obscenos con los que querían mostrar su desacuerdo con el resultado democrático de las urnas que, es posible, no coincida con sus preferencias.

A los reunidos en la plaza Parroquial les molesta un gobierno alternativo al de Alsina, pero no les molestó el macabro regalo de una cabeza de cordero a una concejala porque no vimos a nadie manifestarse.

A quienes acudieron a la plaza Parroquial tampoco les debió importar mucho votar engañados hace cuatro años sin saber que un concejal de Compromís había robado y que el PSPV-PSOE y Podemos lo habían ocultado en campaña.

Aquellos que gritaban contra once concejales que representan la mayoría expresada por los vinarocenses en las urnas no lo hicieron cuando se conoció hace unas semanas la existencia de una caja B en el Ayuntamiento de Vinaròs y como el Alcalde, de entonces y ahora, lo había ocultado durante meses a todo el mundo.

La izquierda no se manifiesta nunca por el interés colectivo, sino movido por la animadversión a que gobiernen aquellos que piensan diferente a ellos. Ha sido así, es y por lo visto, seguirá siendo. Una lástima.

Lluís Gandía, presidente del PP de Vinaròs