El pacto de la vergüenza

El gobierno local, presidido por el socialista Guillem Alsina, ha pactado con el concejal corrupto de Compromís, aquel que robó a todos los vinarocenses, una pena mínima de cárcel y de inhabilitación. Se demuestra así que la firmeza contra la corrupción en el PSPV-PSOE de Vinaròs depende de quien sea quien meta la mano en la caja.

En el Partido Popular lo tenemos muy claro y ante la corrupción tolerancia cero, firmeza absoluta y penas ejemplares. El pacto entre Alsina y Moliner es el pacto de la vergüenza y el pacto que avergüenza a los vinarocenses decentes.

Pero no nos extraña que, aquellos que ocultaron que se robaba a los vinarocenses para ganar las elecciones y solo lo contaron el día después de abrirse las urnas, ahora acuerden una pena mínima con el corrupto que compartió con ellos el gobierno de nuestra ciudad durante 4 años y cuyo partido hace pocos meses ha vuelto a sentarse en la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Vinaròs. Hay incorporaciones al gobierno que ahora entendemos el momento en que se produjeron.

Vinaròs merece un Alcalde y un gobierno decente, y pactar con corruptos una pena mínima e intentar que los vinarocenses no se enteren, no lo es.

Vinaròs merece un Alcalde y un gobierno firme ante la corrupción, y ocultar a los vinarocenses durante semanas que se les estaba robando porque estaban convocadas unas elecciones municipales, no lo es.

Vinaròs merece un Alcalde y un gobierno que exija penas ejemplares a los corruptos, y en este caso ha quedado claro que la actuación de Alsina y su gobierno ha ido en la dirección contraria.

Hoy Alsina es un Alcalde escondido ante su incapacidad para dar explicaciones. El habitual silencio de nuestro Alcalde ante los problemas es hoy una demostración más de su falta de valentía política para explicar una decisión que sólo ha podido tomar él. Y su falta de explicaciones demuestra que no puede mirar a los ojos a los vinarocenses para contárselo.

En política hay pactos que se entienden mejor y pactos que se entienden peor, pero pactar con un corrupto una pena mínima no se entiende de ninguna de las maneras, y mucho menos si encima no se cuentan ni los motivos ni la verdad.

Lluís Gandía, presidente del PP de Vinaròs