Los socialistas llevan un año con su herencia p’arriba, herencia p’abajo. No me gusta hablar de herencia, significa que estás muerto, pero por lo visto los socialistas no han caído en la cuenta de que su proyecto terminó en las urnas a manos de los vinarocenses y allá siguen ellos intentando colgarse medallas ahora porque no fueron capaces de hacerlo mientras gobernaban que es cuando se deben colgar. Vamos proyecto a proyecto.
El segundo centro de salud lo prometió el PSPV-PSOE y el Botànic desde el año 2017. En 2021 dijeron que se iniciarían las obras ese mismo año, en 2022 que las obras comenzarían antes de las elecciones de 2023. ¿La verdad? El proyecto se presentó en febrero de 2024, se aprobó en abril de 2024 y ha sido el gobierno del Partido Popular quien ha licitado las obras por un importe de 9,2 millones de euros.
La ampliación del IES Vilaplana lo prometió el exalcalde Alsina en junio de 2021 cuando reunió a la comunidad educativa y les prometió que antes de acabar 2021 se iniciarían las obras. Con el cambio de gobierno en diciembre de 2023 vimos que faltaba un permiso de ADIF, los pliegos no estaban ni redactados y ese es el trabajo que hemos realizado el gobierno del cambio, que no promete tanto, pero cumple.
Decía el gobierno socialista que Vinaròs necesitaba de instalaciones deportivas, pero por lo visto en ocho años y medio no les dio tiempo para al menos redactar el proyecto de una nueva instalación. El gobierno del cambio tiene en marcha la redacción del nuevo pabellón polideportivo y en durante 2025 también pondrá en marcha el campo de tiro municipal.
Decían los socialistas que Vinaròs necesitaba de un nuevo auditorio, pero tampoco les dio tiempo en ocho años y medio a solucionar esta carencia. Hoy está en marcha la licitación para redactar el proyecto del nuevo auditorio. Una vez más, hechos frente a una herencia que más se parece a un lastre.
Y así podríamos seguir con la plaza Primero de Mayo, con el PAI de la Torre Ballester o con las renovaciones de la calle Arcipreste Bono o la calle Sant Josep que se reformarán con subvenciones logradas por el actual gobierno municipal.
Y mucho nos tememos que durante 2025 los socialistas seguirán hablando de su herencia. Por suerte para los vinarocenses ahora tienen un gobierno municipal que habla de realidades y lo demuestra con hechos. Visca Sant Sebastià!